viernes, 22 de febrero de 2013


LOS NIÑOS SOLDADOS

En la guerra civil de Sierra Leona (1991-2002) estos niños soldados fueron secuestrados, entrenados en el uso de armas, drogados y enviados a matar.


Si toda guerra de por sí ya es un hecho cruel e inhumano, la expresión más brutal y perversa de estos conflictos armados, es la participación  de niños y niñas como soldados. Es por ello que organizaciones internacionales como Amnistía Internacional AI han calificado al secuestro y reclutamiento forzado de menores de edad como Crímenes de Lesa Humanidad.

La participación de niños en conflictos militares, es una realidad que muchas veces pasa desapercibida para la prensa y para la opinión pública internacional. Lo cierto, es que todos los años, miles de niños y niñas son reclutados por ejércitos regulares, por grupos paramilitares o por guerrilleros para la lucha armada.

Ahora, cuando hablamos sobre este tema, solemos relacionarlo inmediatamente con los conflictos que se desarrollan en el continente africano, pero desde hace muchas décadas en otras partes del mundo se ha estado dando esta perversa practica, de  secuestrar a niños o adolescentes para entrenarlos a matar.


En América Latina, durante la larga guerra civil que se vivió en los países de Centroamérica en los años ochenta, fue una práctica común el uso de niños soldados por ambas partes de los contendientes. Por otro lado, Sendero Luminoso, la siniestra guerrilla maoísta nacida en la sierra del Perú, en su periodo más criminal, secuestraba y enrolaba a la fuerza sin ningún reparo, a niños y niñas para incrementar sus huestes asesinas. En Colombia durante el auge de las guerrillas y de los grupos de paramilitares, se vivió una situación parecida, según los reportes de Amnistía Internacional publicados en la época, tanto las guerrillas de las FARC y del ELN, como el ejército regular colombiano, tenían reclutados en sus filas a menores de edad, violando toda normativa internacional sobre protección a menores en situación de riesgo.

Niño recluta de las Fuerzas Patrioticas de Liberación del Congo, grupo terrorista
liderado por Thomas Lubanga quien fue condenado a prisión por
crímenes contra la humanidad.
También diversas organizaciones islamistas en Asia, como Abu Sayyaf en Filipinas, el Ejército de Salvación Arakan en Myanmar o los Talibanes en Afganistán, regularmente usaron a niños-soldados como combatientes. Lo mismo pasó en la guerra en Siria, la muy publicitada y cruenta guerra civil que se vive en este país del Medio Oriente, tenía como reclutas en los grupos insurgentes anti gubernamentales a niños soldados quienes eran adoctrinados en el fanatismo islámico, enrolados a la guerrilla y entrenados en el uso de armas. Esta práctica cruel y brutal se dio ante la pasividad y complicidad de los países occidentales, quienes a sabiendas de este ilegal reclutamiento de menores, financiaron, entrenaron y armaron a las fuerzas opositoras del Consejo Nacional Sirio.

Tampoco no hay que olvidar lo que paso en Mali durante la operación militar Serval auspiciada por Francia en el 2012, según informes de AI se confirmó la presencia de niños soldados participando activamente en los combates que tenían lugar entre las tropas de los grupos islamistas del norte de Mali y el ejercito maliense, quienes operaban con el apoyo de tropas francesas. Los islamistas y el ejército regular reclutaron, entrenaron y usaron a cientos de menores en sus filas desde el inicio de la ocupación militar francesa. 

Al tratar este tema, no podemos dejar de mencionar las traumáticas experiencias vividas en las guerras civiles que se produjeron en territorio africano, en especial las que se dieron en Sierra Leona (1991 al 2002) y en Liberia (1990 al 2003), cruentos conflictos armados que involucraron a más de 50,000 niños y niñas soldados en ambos países. Estos niños fueron secuestrados, abusados sexualmente, esclavizados, mutilados, entrenados en el uso de armas, en muchos casos drogados y enviados a matar. Hechos atroces, que pasaron casi desapercibidos para la prensa mundial y cuyo único objetivo era la explotación y el comercio de las ingentes reservas de diamantes que poseían ambos países. Más aún, está confirmado que detrás de este sucio comercio de los llamados “diamantes de sangre”, estuvieron los intereses de empresas transnacionales y de potencias económicas.

A pesar de estas dramáticas experiencias, en la actualidad se sigue enrolando a niños soldados en diversos lugares de África como: en la República Democrática del Congo, Somalía, República Centroafricana, Sudán y Sudán del Sur, con las mismas traumáticas y nocivas consecuencias, para los menores involucrados.

Como vemos, lamentablemente no estamos ante un fenómeno aislado, es una historia que se repite en cada nuevo conflicto que surge en el mundo, aunque en el África se presenta con mayor intensidad.


La participación de niños en conflictos es una realidad que muchas veces pasa desapercibida para la prensa y para la opinión pública internacional” 


“los conflictos armados en que participan niños soldados están relacionados con el control de los recursos naturales”

Hasta hoy nadie sabe en realidad cuantos menores están siendo utilizados en este momento como soldados en diversas partes del mundo. Amnistía Internacional –AI- en su último informe anual, cita un cálculo que hizo las Naciones Unidas en el año 2013, en donde se hablaba de 350,000 niños y niñas soldados que se encontraban combatiendo hasta ese año en diferentes conflictos en el mundo. 

Solemos utilizar el término niños soldados pero en la práctica estos menores son utilizados como cocineros, lavanderos, para mandados o con fines sexuales. Asimismo, hay muchas niñas que realizan en los campamentos militares, las mismas funciones que los varones, tomando parte en combates y acciones bélicas, además de ser utilizadas como esclavas sexuales.

No olvidemos, que este fenómeno de los niños soldados, surge porque hay guerras y en particular en África, la mayoría de estos conflictos están relacionadas con el control de las materias primas del continente, ya sean diamantes (como en el caso de Sierra Leona o Liberia), petróleo y gas (recursos que enfrentan a Sudán y Sudán del Sur), coltán y uranio (origen de las guerras en las Repúblicas Democrática del Congo y Centroafricana), así como pesca,  madera y otros recursos.

Además, utilizar niños o niñas en conflictos armados resulta más barato y eficaz, por el bajo costo que demanda el mantenimiento de los menores, por lo fácil que resulta ser manipulados y lo rápido que pueden ser remplazados.

Niños soldados de los grupos violentistas de la Republica Centroafricana.
Además, no hay que olvidar que la existencia de estas guerras está muy unida al tráfico de armas. Recordemos que los cinco países que son miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y que por tanto tienen como obligación garantizar la paz y la seguridad en el mundo, son los principales fabricantes y exportadores de armas en el planeta. Y como dato adicional, habría que añadir que muchas de las armas ligeras, que están fabricando estas potencias, están diseñadas pensando en que van hacer utilizadas por niños y niñas, porque los fabricantes saben que estas criaturas son las que constituyen el grueso de los grupos guerrilleros que operan en África.

Ante esta dramática situación, no nos queda otro sentimiento que no sea el de frustración y pesimismo, porque no existe hasta ahora, voluntad política departe de los gobiernos que podrían hacer algo para poner fin a este fenómeno. No será porque no existen Convenios, normas, convenciones, declaraciones, resoluciones a nivel nacional e internacional. La realidad, es que todos estos documentos terminan siendo papel mojado. Lo vemos en el hecho de que todavía se siguen utilizando a miles de niños y niñas como soldados en numerosos conflictos.

Es verdad, que en los últimos años, gracias al trabajo indesmayable, pero poco reconocido de ONG y organizaciones humanitarias se ha podido rescatar a muchos menores soldados de esta arriesgada situación. Sin embargo,  no basta sacarlos de la violencia en una determinada región del mundo, porque al mismo tiempo se inician otros conflictos en otros lugares, que también echan mano a estos niños soldados.

Detrás del comercio de los llamados "diamantes de sangre" estuvieron los
intereses de las grandes transnacionales y de potencias económicas.
Pero pareciera, que no todo está perdido, en el año 2012 se han producido avances que podrían frenar el uso de menores soldados. Dos sentencias cruciales de la Corte Penal Internacional –CPI- y del Tribunal Especial para Sierra Leona han logrado progresos importantes contra la impunidad y sentando jurisprudencia para este tipo de delitos. 

La CPI condenó, en marzo del 2012 a Thomas Lubanga líder de la guerrilla congolesa a 15 años de cárcel, por reclutar y alistar a menores de edad en su ilegal grupo armado y el Tribunal Especial para Sierra Leona sentenció al ex presidente de Liberia Charles Taylor a cincuenta años de prisión, por complicidad en la perpetuación de crímenes de guerra, entre ellos la utilización de menores soldados. Estas dos sentencias sientan importantes precedentes y sirven para advertir claramente a quienes hayan cometidos esta clase de crímenes que sus actos no quedaran impunes.

Esperamos, que estas acciones judiciales sirvan para evitar que se sigan reclutando niños y niñas soldados por parte de los diversos grupos armados y para que se pongan en práctica políticas concretas para garantizar que se cumpla el derecho internacional humanitario, en especial contra estos brutales Crímenes de Lesa Humanidad.






martes, 19 de febrero de 2013


              CUENTOS    POPULARES
                                                                AFRICANOS

Los cuentos tradicionales, transmitidos de generación en generación de forma oral, han cumplido en todas las sociedades, incluyendo las africanas, diversas funciones. Una de ellas, es inculcar desde muy jóvenes los valores de la comunidad. No es extraño, por esa razón, encontrar las narraciones de los cuentos muy conservadoras o simplistas. Los cuentos refuerzan la moral social, explicando las reglas que rigen la vida de la comunidad y sus valores (el protagonista es recompensado o castigado según sus meritos). Además, según la región donde procedan, las narraciones cortas definen y explican, de una manera mágica, el origen de las cosa, delos animales o del nombre de los lugares.
Otro papel importante de los cuentos ha sido, su carácter pedagógico para los más pequeños. En algunas sociedades africanas era costumbre, no comunicar nuevos conocimientos a un niño antes de haberle contado un cuento para según, cuales fueran sus reacciones del niño, juzgar si el nivel intelectual del pequeño era suficiente para recibir nuevos conocimientos y avanzar en el aprendizaje. De ahí, la importancia y trascendencia de la tradición oral africana, no solo en la preservación de su identidad cultural, sino en la transmisión de valores  y principios éticos que sustenta a su sociedad.
En esta entrada, les brindamos cuatro cuentos de diversas zonas del continente africano ( Namibia, Benín, Nigeria y Ghana), para que puedan acercarse un poco más, a la inabarcable riqueza de la literatura oral del continente donde nació la humanidad.

                                                                                                                                                    JAVIER  FERNANDO MIRANDA  PRIETO



  
   ¿POR QUÉ  EL  COCODRILO  TIENE  LA  PIEL                             
                      ASPERA Y RUGOSA?



En algunas aldeas de Namibia cuentan, que hace mucho, mucho tiempo, el cocodrilo tenía la piel lisa y dorada como si fuera de oro. Dicen que pasaba todo el día bajo el agua, en las aguas embarradas y que sólo salía de ellas en las noches, reflejándose la luna en su brillante y lisa piel. Todos los otros animales iban a esas horas a beber agua y se quedaban admirados contemplando la hermosa piel dorada del cocodrilo.

Este, orgulloso de la admiración que causaba su piel, empezó a salir del agua durante el día para presumir de su piel. Entonces los demás animales, no sólo iban por la noche a beber agua sino que se acercaban también cuando brillaba el sol para contemplar la piel dorada del cocodrilo.

Pero sucedió, que el sol brillante, fue secando poco a poco la piel del cocodrilo, cubierta de una capa de reluciente barro y cada día iba poniéndose más fea. Al ver este cambio en su piel, los otros animales iban perdiendo su admiración.
Cada día el cocodrilo tenía su piel más cuarteada, hasta que se quedo, como la tiene ahora, cubierta de grandes y gruesas escamas parduzcas. Finalmente, ante esta transformación, los otros animales no volvieron a beber durante el día y contemplar la antigua hermosa piel dorada del cocodrilo.

El cocodrilo, antes tan orgulloso de su piel dorada, nunca se recuperó de la vergüenza y humillación y desde entonces, cuando otros se le acercan se sumerge rápidamente en el agua, con solo sus ojos y orificios nasales sobre la superficie del agua.





  ¿POR QUÉ LA HIENA TIENA LA PIEL CON RAYAS?


Hace mucho tiempo, una hiena y una liebre eran muy buenos amigos. Pero la hiena, le engañaba a la liebre y cada vez que esta pescaba un pez grande, era la hiena quien se la comía. La hiena inventaba juegos extraños y tras acordar que el que ganaba se comía el pez, la hiena siempre acababa ganando y comiéndose el pescado.




Un día la liebre, pesco un gran pez y se lo dijo a la hiena:


 -   ¡Hoy es mi día! Hoy me comeré solo  este  gran pez.


-     Es demasiado grande para tu estomago tan pequeño, la decía la hiena. Se pudrirá antes que te lo puedas comer todo.


-     Es verdad, dice la liebre. Pero lo pondré ahumar por la noche para conservarlo en pedazos pequeños. ¡Estará delicioso!

La hiena no aguantaba la envidia y seguía deseando comerse el pescado de la liebre. ¡Me lo comeré yo solo! Se decía a sí misma. Y no hacía más que planear, para satisfacer su egoísmo.

Legada la noche, la hiena cruzó sigilosamente el río, acercándose hasta donde dormía la liebre. En ese momento el pescado se estaba cocinando, se asaba lentamente y la grasa que caía sobre las brasas perfumaba el ambiente. La hiena se relamía ya de gusto, riéndose de la liebre de la sorpresa que se llevaría ésta al ver  que le habían robado el pescado que tanto soñaba.

Mientras tanto, la liebre estaba acostada haciéndose la dormida pero muy atenta a lo que hacia la hiena. Cuando la hiena agarró el primer trozo de pescado, la liebre se levanto de repente, cogió la parrilla que estaba encima del fuego y corriendo tras la hiena, le azotaba con ella mientras la hiena aullaba de dolor, de vergüenza y de rabia.

La hiena acabó con todo el cuerpo marcado con las barras de la parrilla y desde entonces las hienas llevan rayas en la piel y por eso desde entonces las hienas odian a las liebres.



    ¿POR QUÉ LAS MOSCAS MOLESTAN
                       A LAS VACAS?


Cuando Diaha Umo era Reina de Calabar (la actual Ghana), siendo muy rica y hospitalaria, solía dar grandes banquetes a todos los animales domésticos, pero nunca invitaba a los animales salvajes por que les tenía miedo.
En una de las fiestas que daba, había tres grandes mesas y dijo a la vaca, que puesto que era el animal más grande de los presentes, se sentara al principio de las mesas y distribuyera la comida a los demás.
La vaca dijo que así lo haría, y comenzó a distribuir el primer plato y se olvido de la mosca por ser tan pequeña.
Cuando la mosca vio esto, pidió a la vaca que le diera su parte, pero la vaca le dijo: “Estate tranquila amiga, debes tener paciencia.
Cuando llegó el segundo plato, otra vez la mosca pidió su parte a la vaca, pero la vaca señalo a su propio ojo y le dijo a la mosca que recibiría su comida mas tarde.
Finalmente, todos los platos se acabaron y la mosca, sin haber recibido comida, se fue a la cama sin cenar.
Al día siguiente la mosca se quejó a la Reina, la cual decidió que, puesto que la vaca no había dado a la mosca su parte, si no que había señalado a su ojo, en el futuro la mosca siempre obtendría su comida de los ojos de la vaca e incluso ahora, a donde quiera que van las vacas, siempre hay moscas alimentándose de sus ojos, de acuerdo con las ordenes de la Reina.
 


              EL  CUENTO  DE  ELEGUA

El cuento de  de Elegua, narra la historia que hace muchos años, en el reino fastuoso de un monarca africano, nació su hijo primogénito a quien llamaron Elegua. A los ocho años el niño, que era muy precoz, osado y travieso y daba mucho trabajo a sus progenitores. Un día caminando por la orilla del mar con su guardián, vio un objeto brillar junto a la palmera y corrió a tomarlo.


Su guardián trato de impedirlo, previéndole que podía ser un objeto peligroso, ya que se veía raro y tenían dos intensas luces en el lugar de los ojos y una nube blanca y leve salía de su boca, pero Elegua escapo de las manos de su protector y corrió para tomar el objeto para llevárselo.


Cuando lo tuvo, vio que era el fruto de un cocotero y quedo fascinado, entonces una voz que le decía: “Cuídame y líbrame de las polillas y los gusanos que querrán comerme con el tiempo; si me proteges te daré salud y prosperidad. El niño prometió al coco cuidar de él mientras viviera y se lo llevó al castillo.
Allí contó su historia a su padre y a toda la corte, pero todos se burlaron de él y jugaron pelota con el coco, tirándolo a un lado y a otro sin que Elegua pudiera evitarlo y el consejero del Rey le dijo a este: “Tu hijo te dará problemas con esa imaginación que tiene, vamos a esconder el coco para que se olvide de ese invento”.


Pero ese mismo día, el niño enfermó y tres días después murió. La corte y todo el pueblo lloraron la muerte del príncipe y llamaron a un adivino que les dijo, que un genio bueno que vivía encerrado en el coco había sido ofendido y ultrajado y que por eso había muerto el príncipe. A partir de ese momento, el Rey arrepentido mando venerar al coco y pedir su perdón y protección, pero los ojos del coco nunca más volvieron a brillar.

Consultado, nuevamente el adivino dijo: “Debemos ponerle ojos, boca y oídos para que nos escuche, vea y pueda hablarnos”. Así que le incrustaron unos caracoles en el lugar de los ojos y el genio volvió a ver. Luego le incrustaron dos conchas en los oídos y el genio volvió a escuchar sus plegarias. 

Por último, le pusieron una boca y el genio habló y transmitió toda su sabiduría aquel pueblo ignorante y lo perdonó. El coco, a quien pusieron el nombre del príncipe Elegua fue desde entonces adorado y consultado con respeto por todos los sabios, adivinos y curanderos de todos los tiempos.







     





















sábado, 16 de febrero de 2013

¿QUÉ BUSCA

CHINA EN ÁFRICA? 


Por: Javier  Fernando  Miranda  Prieto

Los diversos intereses que tiene la Republica Popular China en el África podrían ser definidos con una sola frase:   Buscan un nuevo consenso
En una entrada anterior (¿Qué buscan los Estados Unidos en el África? del 13-01-2013) nos interrogábamos sobre el interés que tiene en la actualidad, la primera potencia económica mundial en el continente africano. En ese artículo señalábamos, que si habríamos que definir en una sola palabra el rol que los norteamericanos le quieren asignar al África dentro de su actual estrategia global, esa palabra seria: Seguridad.
Una seguridad económica, referida al control de materias primas en especial las energéticas. Seguridad geopolítica-estratégica, ante el peligro de la presencia en el Magreb de islamistas radicales anti-occidentales, temor confirmado ante los últimos acontecimientos producidos en Mali. Y una seguridad de dominio comercial referente al control de los mercados africanos ante la fuerte competencia de las potencias emergentes.

Pero ahora, si queremos hacernos esa misma pregunta, en relación al intereses que tiene la República Popular China en el África,  estos podrían ser definidos con una sola frase: busca un nuevo consenso.

En poco más de una década es notable la gravitación que tiene la potencia asiática en el concierto de los países africanos. El comercio, el flujo de inversiones, las migraciones y los programas de ayuda al desarrollo entre otros, son ámbitos en los que China está cada vez más presente en el África.

Imagen que grafica la presencia economica de China
en el continente africano.
Esta gravitación de China abierto una alternativa a las tradicionales políticas neoliberales imperantes en el continente africano. Podríamos decir, que ante el Consenso de Washington ahora los países africanos tienen la posibilidad del Consenso de Beijing, que por supuesto no garantiza automáticamente el desarrollo, pero constituye una vía a explorar.

La gran potencia asiática, la segunda economía mundial, que para muchos se despunta como la primera potencia en las próximas décadas ha venido experimentando espectaculares indicadores de crecimiento y para ello ha tenido que buscar alianzas estratégicas que garanticen el suministro de materias primas y fuentes de energía para poder sustentar su modelo de desarrollo. En ese contexto, África se convierte en un socio privilegiado por la abundancia de recursos naturales que posee, además de ser un mercado emergente para la manufactura china.

Las inversiones chinas en África en el último decenio, en buena medida han estado relacionadas a su necesidad estratégica de petróleo y otros recursos naturales (productos agrícolas, uranio, coltán, recursos hídricos), de modo que una parte más que significativa de estas inversiones van a parar al sector extractivo, teniendo fuertes inversiones en países como: Angola, Sudáfrica, Sudán, Níger o Nigeria.

Asimismo, China ha instalado cinco zonas francas industriales en diversos puntos del continente africano (Zambia, Tanzania, Ghana, Chad y Nigeria), industrias orientadas a la exportación en donde el capital lo pone los chinos, pero la materia prima, la mano de obra y las exoneraciones tributarias las ofrecen los países africanos.

Ahora, como parte del nuevo consenso que busca China, África recibiría: ingente financiamiento en ayuda pública al desarrollo (a menudo en forma de infraestructura), una gama de créditos blandos, la garantía de no interferencia en asuntos internos, la utilización de mano de obra africana (previa calificación y capacitación), condonación de parte significativa de su deuda externa, además de oportunidades de negocio para el sector privado africano.

Este nuevo enfoque que quiere darle China a su acercamiento al África, se enmarca dentro de una relación de cooperación sur-sur, lo cual supone una novedad relevante en el contexto africano que viene a quebrar el monopolio occidental del control de la economía internacional africana y que también es reflejo de los cambios que se dan en la economía mundial, con el creciente protagonismo de los denominados países emergentes (India, Irán, Brasil, Turquía, Sudáfrica).

Este nuevo Consenso de Beijing con los países africanos se ha estado expresando, desde hace más de una década, en una creciente y superavitaria relación comercial. En el año 2000 el intercambio comercial entre China y los países africanos llegaba a los 10,000 millones de dólares, en el 2005 a los 40,000 millones y en el 2006 a los 55,000 millones, convirtiéndose así China en el segundo socio comercial del África, después de los Estados Unidos.  En el año 2009, el superávit comercial con China empezó a trepar hasta más de 50,000 millones de dólares, como se ve en el primer cuadro.
Además, ese año China se convierte en el primer socio comercial de los africanos, llegando en el año 2011 a mover una balanza comercial de más de 100,000 millones de dólares, como se grafica en el cuadro siguiente.

De este modo, año tras año China ha ido aumentando su presencia económica en África. Esto ha tenido consecuencias claras  para las empresas occidentales, cada vez más han estado perdiendo contratos y negocios a favor de las compañías Chinas. También los mercados financieros son testigos de cómo los préstamos que anteriormente los estados africanos pedían a las instituciones occidentales ahora han disminuido considerablemente.

Un dato adicional es la desconcentración de los flujos comerciales desde el punto de vista espacial, que se ha estado operando en el continente. En el año 2009, como se detalla en el siguiente cuadro, los países africanos que comerciaban con China sumaban una veintena de países de los cuales cinco naciones concentraban más de la mitad de las exportaciones africanas a China, esta concentración espacial se ha venido diluyendo en los últimos años. En la actualidad, el gigante asiático comercia con casi la totalidad de las 55 naciones africanas.


Por otra parte, mientras occidente a recurrido a la ocupación militar, a través de la instalación de bases militares en la región, o a los golpes de estado para asegurarse gobiernos amigos que les permitan acceder a las materias primas, China ha utilizado otros métodos pacíficos para conseguir los mismos resultados. Dentro de la búsqueda de un nuevo consenso, China a privilegiado: el ofrecimiento de préstamos a bajos intereses, la construcción de infraestructura y la entrega de regalos o donaciones a cambio de recursos naturales.

En la actualidad, se ve por todo el continente africano estadios de fútbol, autopistas a desnivel, edificios públicos, monumentos a sus héroes nacionales, todo donado por el gobierno chino. Como se nota en el mapa adjunto, China ha estado construyendo en la ultima década más de veinte modernos estadios de fútbol, en 13 países del continente, aprovechando el fanatismo que tienen los africanos por este deporte. Pero como la cultura china está llena simbolismo, quizás el elemento más representativo de esta práctica de donativos sea el nuevo y moderno edificio de la Unión Africana construido en la ciudad de Addís Abeba capital de Etiopía, totalmente financiado por Pekín. Muchos críticos a este regalo ven en él el mayor ejemplo del control chino sobre los dirigentes del continente.


Pero el aspecto más controversial de la ayuda china, es la ausencia de condicionalidades políticas-económicas, lo que contrasta fuertemente con los tradicionales paquetes de ayuda occidental, que implican numerosas condiciones, tanto de tipo económico, como de tipo político. Esta ausencia de condiciones, tiene una doble lectura, ya que por una parte permite al gobierno que recibe la ayuda, aumentar su margen de maniobra a la hora de diseñar e implementar políticas, pero por otra parte indirectamente significa en algunas ocasiones, dar apoyo a gobiernos poco respetuosos con los derechos humanos o libertades democráticas, como Zimbabue o Sudán.

Como vemos, si queremos dar una respuesta cabal a la pregunta que encabeza este artículo, tendríamos que concluir que tanto los Estados Unidos como China tendrían el mismo interés en el continente africano, es decir, el aprovechamiento y el uso indiscriminado de los ingentes recursos naturales que posee África para beneficio propio. Solo que los norteamericanos inscriben esos intereses dentro de una política de Seguridad económica, geopolítica y estratégica, mientras la República Popular China se plantea la relación con los países africanos, dentro de la búsqueda de un nuevo Consenso, de un nuevo diseño de las relaciones con África, a partir de reconocerse como iguales.

Si comparamos lo que han conseguido hasta ahora las dos potencias mundiales en el África, creo que el coloso asiático viene ganándoles la partida a los norteamericanos en ese imaginario tablero de ajedrez político instalado en plena sabana africana.




jueves, 14 de febrero de 2013


EL  SAHEL: 
ESA  ASIGNATURA  PENDIENTE

Por: Javier  Miranda  Prieto

En el Sahel lo más urgente es la falta de agua potable, la desesperación empuja a la población a beberla de cualquier lugar, ocasionando diversas enfermedades.


Según las últimas informaciones procedentes del norte de África, -muchas de ellas no confirmadas, dado que la prensa internacional sigue sin tener acceso a las zonas más importantes de este conflicto, ya que el ejercito francés sigue obstaculizando el acceso a los puntos más relevantes de esta operacíon militar- las fuerzas combinadas franco-malienses están logrando, desde hace dos semanas, tomar control definitivo de las más importantes ciudades del norte de Mali, antiguos bastiones de las fuerzas integristas musulmanas. Las cuales se están reorganizando y desplazándo, para crear nuevos santuarios de islamistas antioccidentales, hacia otros países de la región.

Por otro lado, este nuevo avance y reposicionamiento de las fuerzas interventoras –de Francia y Mali- lamentablemente han producido numerosas bajas, especialmente entre la población civil. Hay numerosos testimonios de abusos y ejecuciones sumarias llevadas a cabo por el ejército, pero no solo por el ejército, también a nivel social está habiendo persecuciones étnicas contra los árabes y tuaregs, supuestos colaboradores de terroristas. Lo cual  nos demuestra a las claras, que la violencia esta generando una peligrosa dinámica propia y que esta guerra está lejos  de quedar resuelta. La solución a este conflicto se debe dar - y ahí está la clave de la solución- a través de la intervención, principalmente de los ejércitos africanos de la región. Es decir, los mismos africanos, deben de dar solución a los problemas africanos.

Las tropas franco-malienses toman control del norte de Mali, mientras el Sahel
sigue sufriendo una severa sequía.
Pero mientras esta solución se da, es totalmente pertinente esbozar, desde ahora, una agenda con los tres temas prioritarios, que se deberían abordar, apenas se ponga fin al conflicto armado en Mali.

El primer punto de esta agenda, será analizar como la comunidad internacional puede apoyar la vuelta al orden constitucional, restableciendo el régimen democrático, en una sociedad como la maliense, que fue ejemplo de estabilidad política, por más de veinte años en esta región del África. La convocatoria de elecciones generales, para el 31 de julio de este año, debe de estar precedida de un gran acuerdo nacional, que convoque a todas las fuerzas políticas y sociales del país.

Otro punto de agenda importante, es el tema de la minoría Tuareg. Pueblo asentado históricamente en norte de Mali y que lucha desde hace décadas por sus justas reivindicaciones territoriales, culturales y políticas. Actualmente, los países de la zona, están presionando al gobierno interino de Mali para que antes de convocar nuevas elecciones,  abra las negociaciones de paz con los tuareg moderados, los cuales –hasta el día de hoy estas refugiados en la ciudad maliense de Kidal- bajo supervisión militar francesa y que el gobierno de Bamako asuma las reivindicaciones de esta minoría, que siempre se sintió marginada por la mayoría negra. Este reconocimiento político permitiría aislar y quizás incluso animaría a dejar las armas, a los tuareg radicales asociados a los yihadistas de Al Qaeda.

Adicionalmente, como un tercer tema –pero no menos importante- de esta agenda futura para la problemática política y social, que deberá afrontar los malienses después del actual conflicto armada, es la difícil situación humanitaria que viven o mejor dicho sobreviven la población del Sahel y que ningún gobierno de la zona lo han sabido afrontar adecuadamente. Y estoy incluyendo también y principalmente a las grandes potencias mundiales. Esta extensa franja de territorio desértico, que comparten varios países como Mali y sus vecinos, periódicamente padece frecuentes y dramáticas sequias, con su secuela de hambrunas generalizadas y alta mortalidad infantil generando recurrentes crisis humanitarias, como las vividas el año pasado.

El Sahel es una franja de territorío desértico que comparten varios países.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia –UNICEF- en el año 2012 hizo un llamado a las potencias mundiales, entre ellas Francia y sus aliados europeos, para crear un fondo de emergencia de cuatro mil millones de dólares, para poder salvar la vida de más de dos millones de niños de los países del sahel, que estaban condenados a  muerte por inanición. Ante ese requerimiento se recaudo una mínima cantidad de dinero, en comparación a los ingentes presupuestos militares que han posibilitado el despliegue de todo el aparato militar francés y el apoyo logístico del resto de los países europeos, ante el conflicto militar en el Magreb. 

Conflicto que ha supuesto una dramática escalada en el número de refugiados que han huido a los países vecinos. Lo cual podría agudizar la crónica crisis humanitaria que se vive recurrentemente en el sahel. Convirtiendo este tema humanitario, en una grave asignatura pendiente.

El Sahel es una extensa zona geográfica que se extiende al sur del desierto del Sahara y al norte de la sabana semi-tropical, esta franja desértica corre de lado a lado del continente, de oeste a este, del Océano Atlántico al Mar Rojo, cuya extensión abarca más de tres millones de kilómetros cuadrados. El Sahel comprende parcial o totalmente países como: Senegal, Mauritania, Argelia, Burkina Faso, Chad, Sudán, Eritrea y Mali. En este último país, la guerra entre el gobierno y los islamistas ha obligado a más de 400,000 personas a dejar sus hogares y buscar refugio y alimentos en otros países de la región.

En el Sahel hace falta de todo, pero lo más urgente es agua potable y agua para riego agrícola. Según el último reporte de la Unicef, la desesperación empuja a los refugiados a beberla de cualquier lugar o a obtener el agua de cualquier manera. Esto crea en ocasiones graves problemas de salud: el agua contaminada es el origen de las enfermedades diarreicas que causa la muerte de miles de niños al día.

La acción de la Unicef en el Sahel es fudamental, mientras los países
desarrollados solo piensan en acciones militares.
Según el organismo de las Naciones Unidas, se necesitan más pozos y cada vez más profundos, por que los acuíferos están agotados en la zona, hay que reacondicionar los existentes o llevar camiones cisternas, que tienen que recorrer cientos de kilómetros por caminos sin asfaltar. 

Y esto en un territorio donde la seguridad de los refugiados y los trabajadores humanitarios está amenazada por los grupos armados que operan en toda la región.

A pesar del entusiasmo demostrado por los países desarrollados por financiar aventuras belicistas y su avaricia manifestada hacia acciones humanitarias, el Sahel necesita agua ya, porque el número de refugiados, producto de conflictos que estos mismos países centrales han generado, crece sin cesar y esto invalida incluso los cálculos más pesimistas.

Como se ha mencionado, en esta desértica región se hallan los países menos desarrollados del mundo. Las cifras que ofrecen las organizaciones humanitarias con alarmantes. Dos millones de niños sufren riesgo de desnutrición este año, si la comunidad internacional no se moviliza.
La zona es una bomba de relojería por varios motivos. Por ejemplo, la inestabilidad del clima, que se traduce en el aumento de las inundaciones en algunos lugares, y a la vez, las fuertes sequías en otros, lo que ha provocado cambio en el calendario agrícola.

La situación actual del Sahel podría derivar en una hambruna generalizada
ante la pasividad y disimulo de las grandes potencias.
Un ejemplo de las consecuencias del cambio de las lluvias lo protagoniza el Chad. En este país la falta de agua ha provocado importantes retrasos en la campaña agrícola. Además, según señala Unicef, en el Chad el reclutamiento de niños por los grupos armados sigue siendo un grave problema.

Las reservas alimentarias también se están acabando en Burkina Faso, Níger y Mauritania. En estas naciones la malnutrición aguda ha ido aumentando año a año. La venta del ganado, el endeudamiento y la reducción de la cantidad y calidad de alimentos son algunos de los elementos de esta crisis.

Como sabemos, en el fondo de toda crisis humanitaria, existe el mismo telón, el aumento de los precios de los alimentos, el cambio climático, la sequía, los conflictos armados y la pobreza. Todos ellos unidos llevan a la población a la pobreza extrema.

Pero esta situación no se puede combatir de otra manera, que no sea a mediano y largo plazo. Hay que invertir en educación, en políticas agrarias sostenidas, hay que luchar para la independencia alimentaria y económica de estos países.

Sobre la situación actual que sufre el sahel, podría derivar en una hambruna generalizada, como se vivió en años anteriores, ante la pasividad y el disimulo de las grandes potencias. Unicef no se aventura, pero  sí que recalca que, si no se hace lo suficiente, la amenaza que se cierne en esa región generaría en una grave crisis humanitaria. Por ello la importancia de prever desde ahora, una solución inmediata y definitiva a la situación humanitaria del sahel, esa casi eterna asignatura pendiente.